Las misiones se estructuran como una serie de etapas.
Estas etapas pueden ser de inicio o final, que sirven como introducción y conclusión de la misión, sin requerir que el usuario realice ninguna acción, o pueden ser etapas de acción. Las etapas de acción (todas las etapas intermedias) buscan que el usuario realice las acciones necesarias para completar la cadena de logros que le llevará a la resolución del reto. Estas etapas de acción pueden, opcionalmente, tener un o más resultados evaluables y validables (evidencias de aprendizaje) y por tanto ofrecen la posibilidad de generar retroalimentación para el aprendedor. Además, las misiones pueden presentar bifurcaciones en su secuencia de etapas definiendo rutas alternativas para la resolución del reto. Dichas bifurcaciones pueden estar basadas en validaciones automatizadas o humanas de los resultados alcanzados en la etapa o en las propias decisiones de los usuarios.
Journey del Diseñador


